Cuando la pasión une, la naturaleza conspira…
Eric y yo compartimos muchas pasiones, entre ellas: turistear, el mar, saborear y disfrutar un buen queso y un buen vino, la Buena mesa… y la noche. Este pasado domingo, todo fue uno.
Nos fuimos a conocer un área hermosa de mi Patria, el pueblo ganadero de Hatillo, donde literalmente hay la misma cantidad de ciudadanos que de vacas (en serio, hasta letreros hay donde se indica); la intensión original? darle una visita a la Fábrica de Quesos Artesanales “Vaca Negra”. http://www.quesosvacanegra.com/ Gracias a mi amiga Edith Tapia de http://www.cuponeandopr.net/ que me curso la invitación para el OpenHouse.
Antes, habíamos decidido tomar por la carretera núm. 2 y disfrutar de los paisajes que esa vía nos ofrece. Puerto Rico es todo contrastes, en unos momentos vemos unos pueblos con casas y negocios abandonados, escombros y carreteras en mal estado. (Pregunto no habrá una compañia de estas de pintura que organice un pinturathon, o que estas organizaciones de base comunitaria o de fe se preocupen también, por lo menos darle una lavadita de cara a los cascos urbanos de los pueblos?) Y de pronto el área sub-urbana de Arecibo, que hermosos paisajes. Tal parecía que entramos en otra dimensión. Frente a frente la Hermosa costa de Hatillo. Que imagen tan espectacular, que olas, que mar.
Y llegamos. Justo en el centro del Barrio Capaez (nombre que también le dan a una de sus variedades de queso) hay un pequeño, pero agradable lugar. Jamas pensaríamos que,( mas que un laboratorio o una fabrica parece una casita de concreto en el campo), pudiéramos degustar una variedad de quesos y yogurts, hechos por manos puertorriqueñas bajo la creación y dirección de la Lcda. Wanda Otero.
La experiencia? DivaChesee. Los quesos son exquisitos. No tienen nada que envidiar a los quesos extranjeros. Mi gente, son quesos hechos literalmente a mano; son quesos artesanales. Libres de preservativos y de lactosa. Son dignos del paladar mas exigente. Y claro, la Diva adquirió uno de cada uno para traerlos para la casa y acompañarlos con una copita de vino. Son quesos para disfrutar: sentir su cuerpo, textura, sabor.
Y ya terminando nuestra visita le comentamos a unos de los jóvenes que nos dio el recorrido que queríamos cenar en un lugar 3B del pueblo, y donde podríamos comprar pan “de verdad” (marido y yo amamos el pan) qué nos recomendaba. Y sin pensar nos dijo, vayan a Don Primo, a solo 3 minutos de distancia; y el mejor pan del área sería un poquito mas lejos, en Aguadilla, en la Panadería La Campana. Según nos contó confeccionan panes artesanales. Y así que le tomamos su recomendación como buena y nos dirigimos primero al Restaurante Don Primo. http://www.facebook.com/pages/Rincon-Criollo-Don-Primo/356081487820292
(Chef DonPrimo, La Diva y Marido) ( Los bartenders)
Y ahí estaba, Don Primo. 1ra impresión? Amplio estacionamiento, muchos carros, muchos clientes, dijimos: “si esto esta lleno” “umm, parece bien” Nos recibió Kiomara, una jovencita amable, simpática y diligente. El ambiente, super agradable, había música en vivo (nos dijeron que hay música de jueves a domingo y pronto tendrán área de baile), la decoración sencilla pero acogedora, ya de la primera nos atraparon. Y llego el menú, la variedad buenísima y los precios accesibles. Marido chuletas cancan con mofongo ($12.95); yo, arañita rellena con churrasco ($11.95). La cervecita biennnnnn friaa.
Literalmente no como carne, no me gusta, pero esta vez, si estábamos en la región ganadera del país asumimos que la carne tendría que ser de primera, y mi gente así fue, no nos equivocamos. En mi vida, jamas, había comido un churrasco tan sabroso como el que comí en Don Primo. Carne fresca, tierna, jugosa, fue otra cosa, otro nivel. Si tuviera que clasificar la comida del lugar de 1 a 10, seria 100. Por nuestra experiencia, no dudo en recomendarles que se regalen una visita a Rincon Criollo Don Primo, carr.492 Km.1.1 Bo. Corcovada en Hatillo, PR Tel. 787-262-1921. Y de camino, antes, no olviden llevar los mejores quesos de Puerto Rico, los de Vaca Negra
Y el pan? claro de Hatillo subimos para Aguadilla, la Panadería La Campana, compramos pan, café y dulces. Demás esta decirle que los panes artesanales en unión a los quesos de Vaca Negra, son el placer de los dioses.
Fue uno de esos días. Esos días donde los placeres se juntan y el universo conspira. No conforme, nos bendijo una Super Luna… y nosotros al final, fuimos uno.